Los arándanos tienen numerosas propiedades nutricionales. Son ricos en fibra, vitamina C y potasio, tienen bajas calorías y un alto contenido en antioxidantes.
Estos antioxidantes retrasan el envejecimiento celular y también la aparición de enfermedades crónicas, como el cáncer, las enfermedades cardiovasculares y la diabetes.
Los compuestos antioxidantes que se encuentran en los arándanos son: ácido fenólico, taninos, etilbenos y flavonoides.
Los compuestos fenólicos que poseen los arándanos, pueden actuar como un nuevo tipo de antibiótico. Esto permite controlar los microorganismos patógenos del organismo y contrarrestar la resistencia de algunas bacterias a los antibióticos.
A su vez, un tipo de etilbeno -el resveratrol- demostró actividad quimiopreventiva y quimioterápica en las etapas de iniciación, promoción y progresión del cáncer.
Finalmente, se ha demostrado que la biodisponibilidad de los compuestos benéficos contenidos en los arándanos supera la de los suplementos farmacéuticos de venta libre.
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